Diego de Giráldez, aunque joven , con una larga carrera de éxitos labrados a pulso en el duro yunque del trabajo. Reconoce que siempre ha sido una persona un tanto introvertida, que ha mirado y mira más hacia su propio interior, lo que se refleja en la forma de comunicarse y transmitir su obra. De su pintura, y de la de otros, dice que empieza a ser importante cuando se reconoce sin necesidad de ver la firma. Considera el dibujo como la base de cualquier movimiento artístico.
Nadie mejor que el propio pintor Diego de Giráldez resume su biografía, que por cierto es muy viajera: " Nace en A Cañiza, muy pequeño me traslade a Vigo, posteriormente a Cataluña, París y otras partes del mundo, aunque cada tres o cuatro meses volvía a Vigo, donde desde hace años tengo mi residencia habitual".
Su obra se cotiza dentro y fuera del país.
- Ha nacido en A Cañiza,¿Influye en usted su origen rural?
- Siempre influye el origen , los principios, el medio y las circunstancias que vives. Todo esto hace que tengas un concepto de vida y por lo tanto que este presente en tus criterios, en ti mismo, en tu obra.
Estoy orgulloso de haber nacido entre esas verdes montañas.
-¿Hay simbolismo en su obra?
-En mi obra se puede apreciar el naturalismo, la abstracción y el surrealismo,todo dentro del Realismo NAS, movimiento por mí acuñado. Simbolismo en cuanto a ensoñaciones y lo que se refleja de mi inconsciente es indudable, pero también es innegable que no se opone al realismo
por oponerse, en el concepto anterior.
-Para ser pintor ¿qué es imprescindible?
-La base fundamental de cualquier movimiento artístico ya sea pictórico o escultórico, es el dibujo. Teniendo esto en cuenta es fundamental tener un estilo propio, reconocido y reconocible, que sepan que aquel cuadro es tuyo sin necesidad de ver la firma. El estar en los circuitos internacionales, en los verdaderamente importantes.
-¿Hay algún cuadro que nunca vendería?
- Nunca venderé ni las esculturas ni las pinturas que van a pasar a mi casa museo, los de mi colección privada. Guardan para mí distintos recuerdos.
Voz de Galicia.
