sábado, 28 de marzo de 2009

LA REALIDAD Y LA PASIÓN DE DIEGO DE GIRÁLDEZ.

La pintura tiene su propia sede en el espacio, en el mundo y el color la acompaña. Una obra caracterizada por la visión realista "de un arte absolutamente inseparable del oficio", en palabras de Santiago Amón. La luz y la noche se combinan para dejar aparecer a las figuras, sabiendo que "el blanco más blanco nace de la explosión comunitaria de todos los colores y que el negro más negro surge cuando la noche se apodera del fulgor del arco-iris". Pura pasión de pintar, suma y sigue Diego de Giráldez.


ATLÁNTICO DIARIO.
Vigo.